La enfermedad de Parkinson (EP) es un trastorno neurodegenerativo que afecta el movimiento, la coordinación y el equilibrio de quienes la padecen. Es causada por la pérdida progresiva de neuronas en la sustancia negra del cerebro, lo que provoca una disminución en la producción de dopamina, un neurotransmisor clave para el control del movimiento.
Si bien no existe una cura para el Parkinson, hay diversos tratamientos médicos, terapias físicas y enfoques complementarios que pueden mejorar la calidad de vida de los pacientes. Uno de estos enfoques es la quiropráctica, que trabaja sobre la alineación de la columna vertebral y la función del sistema nervioso, lo que puede ayudar a mejorar la movilidad, el equilibrio y la postura en pacientes con Parkinson.
En este artículo, exploraremos cómo la quiropráctica puede beneficiar a las personas con EP, qué técnicas se utilizan y qué precauciones deben tomarse.
¿Qué es el Parkinson y cómo afecta el movimiento?
El Parkinson es una enfermedad progresiva que afecta el sistema nervioso central, causando una alteración en el control del movimiento. Sus síntomas principales incluyen:
✔ Temblores en las manos, brazos, piernas o mandíbula.
✔ Rigidez muscular, lo que dificulta los movimientos y la flexibilidad.
✔ Bradicinesia (lentitud de movimiento), que afecta la capacidad de realizar tareas diarias.
✔ Problemas de equilibrio y coordinación, lo que aumenta el riesgo de caídas.
✔ Postura encorvada, que puede generar dolores musculoesqueléticos adicionales.
Estos síntomas pueden empeorar con el tiempo, afectando la calidad de vida del paciente y limitando su independencia. Es por ello que muchas personas con Parkinson buscan tratamientos complementarios para mejorar su movilidad y reducir los síntomas motores.
¿Cómo puede ayudar la quiropráctica a pacientes con Parkinson?
La quiropráctica se enfoca en el sistema musculoesquelético y nervioso, ayudando a mejorar la movilidad, reducir la rigidez y optimizar el equilibrio en pacientes con Parkinson. Aunque no trata directamente la enfermedad, puede complementar otros enfoques terapéuticos al abordar las restricciones biomecánicas y las interferencias nerviosas que pueden agravar los síntomas.
1. La quiropráctica mejora del equilibrio y reducción del riesgo de caídas
✔ Optimización de la alineación vertebral
Las personas con Parkinson suelen desarrollar posturas encorvadas y desequilibrios musculares, lo que afecta su capacidad para mantenerse estables al caminar. Los ajustes quiroprácticos pueden ayudar a reducir la inclinación postural y mejorar la alineación corporal, facilitando un mejor control del equilibrio.
✔ Corrección de desajustes en la columna cervical
Estudios han demostrado que los pacientes con Parkinson presentan alteraciones en la biomecánica del cuello, lo que puede afectar su equilibrio. Ajustes quiroprácticos específicos en la columna cervical pueden mejorar la propiocepción (capacidad del cuerpo para detectar su posición en el espacio), lo que reduce la inestabilidad.
✔ Activación del sistema vestibular
El sistema vestibular, ubicado en el oído interno, es crucial para el equilibrio. Ajustes en la columna cervical pueden estimular la comunicación entre el sistema nervioso y el sistema vestibular, mejorando la capacidad del paciente para mantenerse erguido y prevenir caídas.
2. Aumento de la movilidad y reducción de la rigidez muscular
✔ Disminución de la espasticidad muscular
Uno de los síntomas más limitantes del Parkinson es la rigidez muscular, que afecta la flexibilidad y dificulta el movimiento. Los quiroprácticos utilizan técnicas de movilización articular, estiramientos y ajustes suaves para reducir la rigidez y mejorar la movilidad.
✔ Restauración del rango de movimiento
A medida que el Parkinson avanza, los pacientes tienden a experimentar una reducción en la amplitud de sus movimientos. La quiropráctica puede ayudar a restaurar la movilidad articular, permitiendo que los pacientes realicen actividades diarias con mayor facilidad.
✔ Terapias complementarias
Además de los ajustes vertebrales, muchos quiroprácticos aplican masajes terapéuticos, técnicas de liberación miofascial y ejercicios de rehabilitación, que pueden ayudar a mantener los músculos relajados y flexibles.
3. Optimización del sistema nervioso para mejorar la coordinación
✔ Reducción de la interferencia en la médula espinal
Las subluxaciones vertebrales (desajustes en la columna) pueden comprimir los nervios y afectar la comunicación entre el cerebro y el cuerpo. Al corregir estas subluxaciones, los quiroprácticos pueden optimizar la función neuromuscular y mejorar la capacidad del paciente para coordinar sus movimientos.
✔ Estimulación del sistema nervioso parasimpático
Los ajustes quiroprácticos pueden influir en la respuesta del sistema nervioso autónomo, promoviendo un estado de relajación y reduciendo la tensión en el cuerpo. Esto puede ser especialmente útil para disminuir la rigidez y mejorar la calidad del movimiento.
✔ Mejoramiento del control motor fino
Algunos estudios han demostrado que la quiropráctica puede ayudar a mejorar la capacidad del cerebro para procesar y ejecutar movimientos, lo que podría beneficiar a los pacientes con Parkinson al realizar tareas que requieren precisión y coordinación.
Consideraciones y precauciones sobre quiropráctica en pacientes con Parkinson
Si bien la quiropráctica puede ser beneficiosa, es importante que los pacientes con Parkinson consulten a su médico antes de comenzar el tratamiento. Algunas precauciones incluyen:
✔ Hay que evitar manipulaciones de alta velocidad en la columna cervical si el paciente presenta fragilidad ósea.
✔ Se deben utilizar técnicas suaves y adaptadas a la movilidad y condición de cada paciente.
✔ Trabajar en conjunto con fisioterapeutas y neurólogos para asegurar un enfoque integral.
Conclusión
La quiropráctica puede ser un complemento efectivo en el tratamiento de la enfermedad de Parkinson, ayudando a mejorar la movilidad, el equilibrio y la calidad de vida de los pacientes. A través de técnicas seguras y personalizadas, los quiroprácticos pueden reducir la rigidez muscular, optimizar la postura y mejorar la comunicación nerviosa, facilitando un mayor control del movimiento.
Si tienes Parkinson y buscas una forma natural de mejorar tu bienestar, considera acudir a un quiropráctico especializado en neurología funcional para evaluar un plan de tratamiento adaptado a tus necesidades.
Referencias
- Journal of Chiropractic Medicine. Postural Adjustments and Balance Control in Patients with Parkinson’s Disease. 2021.
- National Parkinson Foundation. Neck Biomechanics and its Impact on Parkinson’s Disease Symptoms. parkinson.org.
- Journal of Manipulative and Physiological Therapeutics. Chiropractic Care and Vestibular System Activation in Neurological Disorders. 2020.
- Cleveland Clinic. Rehabilitation Strategies for Parkinson’s Disease and Chiropractic Interventions. clevelandclinic.org.
- Harvard Health Publishing. The Role of Chiropractic Adjustments in Motor Function Improvement for Neurological Disorders. health.harvard.edu.
- World Federation of Chiropractic. The Effects of Chiropractic Adjustments on Central Nervous System Functioning. wfc.org.
- Journal of Integrative Medicine. Autonomic Nervous System Modulation through Spinal Manipulation in Patients with Movement Disorders. 2019.
- American Journal of Physical Medicine & Rehabilitation. Neuromuscular Responses to Chiropractic Adjustments in Parkinson’s Patients. 2022.
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